-Imposible, estoy soñando
Se frotaba los ojos una y otra vez, miraba a un lado y a otro, alucinado. No podía ser, aquello sólo pasaba en los cuentos. El Genio le sonreía, tan sólo unos minutos antes le había ofrecido Un Deseo. Sólo Uno.
La escena se había desarrollado hacía muchos, muchos años, cuando Alfredito era sólo un niño.
Alfredito guardó el secreto. Jamás habló a nadie del Genio y de su Regalo.
El tiempo fue pasando inexorablemente, y Alfredo no se atrevía a desear nada. No quería gastar su Deseo.
Cuando su padre les abandonó, podía haber deseado que volviera, pero no lo hizo.
Cuando su madre enfermó, podía haber deseado que no muriera, pero no lo hizo.
Cuando se enamoró, podía haber deseado que ella le correspondiera, pero no lo hizo.
Cuando se casó sin amor, podía haber deseado que todo fuera distinto, pero tampoco lo hizo.
Y así, una y otra vez, a cada amarga ocasión que la vida le brindaba para gastar su Deseo, él se negaba.
Alfredo murió viejo y derrotado por una vida gris plomizo.
Y qué fácil hubiera sido pedir un único deseo: ser feliz, pero no lo hizo.
24 comentarios:
Muchas veces nos pasamos tanto tiempo mirando la puerta que se ha cerrado que no vemos la ventana que se nos abre, y dejamos pasar la oportunidad.
Quizas todos seamos un poco Alfredito.
Que raro fue leerlo... raro en el buen sentido, por supuesto.
Un abrazo, y muchas gracias por darte la molestia de ayudarme tanto :)
Habría sido fácil, pero a el le resultaba tan complicado decidirse. Pobre Alfredito. ¡y qué buen relato! Un beso
¡Me ha encantado! ¡Cuánto tenemos que aprender y qué fácil parece todo en los cuentos!
Un abrazo!
¡UAUUUUUUUUU! Me ha encantado este cuento .Habemos muchos Alfreditos en el mundo.Excelente post para reflexionar sobre la forma en que vivimos nuestra vida. Gracias y un beso.
Joer, toda la vida llevo pensando que los de los cuentos son medio tontos... se encuentran un genio al que pedir un deseo y los gastan en chorradas sin darse cuenta de que lo mejor sería pedir como deseo tener deseos ilimitados.... y ahora va la jodía terremoto sevillana esta y me da bien en los morros con una solución mejor y mucho más sencilla.... pedir simplemente "ser feliz"..... plas plas plas requeteplas....
le hago una reverencia, srita.
Guau! Me ha encantado! Me quedo sin palabras.
Saludos.
¡Bravo, Nieves!. Es difícil decir en tas pocas palabras tanto como a la reflexión que nos conduces.
¿De qué vale todo si nada de nosotros mismos tenemos?
Excelente texto ciudadana. Un besazo ahhh y gracias por la introducción de Javier en el Blogguerce... Lo disfrutaremos y lo enlazaré en el mio personal.
WOH! cantaste lindo!
Jope, Yolaviprimero tiene toda la razón, yo también me he planteado alguna vez eso de que desearía si tuviera un genio de esos, y nunca he caído en la cuenta de lo sencillo que sería si pidiera: "Ser feliz" en fin...supongo que serán los nervios de ver que tienes la posiblidad de desear lo que quieras, y por no fallar, el bosque no te deja ver los arboles...
Gracias por tan buena lección. Lo grabaré en mi mente por si las moscas ;)
Un abrazo, y gracias por tus comentarios en mi blog :)
Nieves,
¡qué bueno! tan real como la vida. La indecisión que nos lleva a la infelicidad. La ambición que nos lleva a no compartir. La desconfianza que nos lleva a no dejarnos aconsejar. La frialdad que no nos deja reaccionar ante tanta perdida. Y la inevitable muerte que no nos da otra oportunidad.
Enhorabuena Nieves.
muchos besos
Me ha gustado tu relatoy lo he leido con mucho interes hasta su amargo final.Amargo,pero realista....desgraciadamente hay muchas personas asi,contenidas que no saben disfrutar de sus oprtunidades
Estoy seguro de que no eres una de ellas
Un besazo
Yo creo que si se nos apareciera el genio a cada uno de nosotros y nos concediera sólo un deseo tampoco sabríamos qué pedir. La felicidad es fugaz, por tanto, el deso se consumiría pronto...
Al fin y a la postre, hubiera resultado una felicidad falsa, puesto que noera la que él se elaboró. Dicen que recogemos lo que sembramos y a veces, influye mucho por donde pasamos, quienes tenemos a nuestro alrededor, etc. por eso mismo, pensaría que de que le iba a servir, ¿con quién hubiera compartido esa felicidad o ese deseo, si solo era para él, y seguro que no lo hubier podido compartir con los que él amaba?
Fue un hombre inteligente. Eso suele pasar hoy en día: Deseamos tantas COSAS, lo probamos todo hasta que acabamos asqueados, puesto quenada nos produce la felicidad, ya que ella hay que cultivarla y disfrutarla día a día.
Muchas gracias por tus visitas. Siento no corresponder como quisiera, pero ando un poco liada.
Besicos muchos.
El Genio fue él, al fin y al cabo vivió tal cual deseó... ¿acaso no se cumplió su deseo de forma más real y más auténtica?...
Besos.
Es un buen cuento, me ha gustado mucho y participo de la idea de impersonem, pienso que según se cree así se vive..., que hay que aceptarlo todo pero no desde la resignación ni desde el sacrificio ni como esfuerzo, sino desde la vida, importa la vida.
Muchos besos,
Qué pena... y pensar que puede haber personas que no saben disfrutar de la vida...
Me he encontrado con tu blog y me gusta mucho, con tu permiso te seguiré.
Un abrazo desde mi librillo.
Permiso concedido Rosario, bienvenida.
Bienvenidos los nuevos que asoman por aquí: Iris, yolaviprimero (jeje), Une épiphanie. Gracias a todos por opinar. Muchos besos a todos.
Una lección que necesitamos que nos recuerden más de una vez...
;)
necesitamos personas que se a rriesguen y digan que lo haran po r siempre
gracias por la leccion
pedir las cosas no es garantia de conseguirlas...
yo pido que mi hijo sane...
pido que el amor viva conmigo..
pido muchas cosas....entre ellas la felicidad pero no la consigo...
ahora pido menos...
con un poco de paz interior me conformo...
veremos si tengo suerte...
precioso post nieves...
Alfredito: te está bien empleado por gilipollas y tacaño.
Gabiprog, Milton, Fire, qué me alegra veros por aquí, muchas gracias.
Enric, gracias por todos tus comentarios, me encanta tu sentido del humor. Bienvenido.
Bueno...a lo mejor su deseo fue no pedir deseos, a saber!..al fin y al cabo...¿quien puede fiarse de un genio?, eh?, eh?, eh? ;)
Me ha encantado Nieves!!
Un besote!
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