Decidió sacar la entrada. La película estaba a punto de comenzar y su amigo no había aparecido. Ya que estaba allí, no iba a perder la oportunidad de ver la película que tanto le interesaba.
-Una entrada, por favor. A ser posible en la última fila.
La aburrida taquillera repasó las butacas libres y no encontró ninguna en la última fila. -Lo siento, sólo quedan en la novena , se ve bien desde ahí también.
Resignada entró en la sala. Ya habían apagado las luces y le costó algo localizar su sitio. Hubiera preferido estar en la última fila, resguardada por la pared.
La película era un musical. Las canciones y los bailes se mezclaban entre el guión, y cuando sonaba la música el volúmen en la sala llegaba a ser ensordecedor.
Nadie escuchó su grito ahogado cuando el cable le bordeó el cuello hasta dejarla sin aliento.
Hubiera sido mejor, indudablemente un asiento en la última fila.
25 comentarios:
Oh, maigod. Bien ezcrito, maifren.
Tú da ideas, da ideas...
Habría sido mejor la pared, ende-luego.
Biquiños con House. Soy masoquista.
Muy bueno Nieves, me alegro de verte por aquí...
Yo quitaría el último párrafo; el anterior le da la contundencia necesaria al relato. Qué por cierto tiene un ritmo preciso y un final nada esperado. La última fila, ya sabes, da mucho de si...
Perdón por el atrevimiento.Sólo es lo que yo haría y está claro que el relato es tuyo.
Besicos.
No podia dejar pasar su destino.
Un abrazo
Estaba escrito...
Otra se hubiera ido al fallarle la cita, y a pesar de que no tienen el sitio que quería, entra...
No cabe duda, estaba escrito...
Salud y besitos
La pared es quien mejor nos cuida las espaldas, indudablemente.
Un saludo
Gracias a todos.
Cabopá yo también lo veo como tú, de hecho dudé si dejar la última frase o no, me decanté por dejarla, pero llevas razón, queda mejor sin lo último, aunque lo voy a dejar así que es como lo publiqué. Muchos besos.
No comía palomitas.
Eso es bueno porque la asfixia es menos escandalosa.
Más que nada por no molestar al resto de espectadores.
Besos.
Estremecedor relato.De veras que no me esperaba ese final.
Le vas a quitar al personal las pocas ganas de ir al cine.
Un relato a lo Hitchcock muy condensado.
Besos de tarde mojada.
Inesperado final, ¡me ha encantado!
Besicos muchos.
Leche, tú si me has dejado sin aliento al leerlo.
Vaya película!
Muy bueno, Nieves. Pero, ay, mira que en un cine. Bien podía haber sido en un lugar solitario, pero si tenía ese capricho qué le vamos a hacer.
Besos que no ahoguen.
Pues sí.. última sesión! vaya me ha estremecido el relato, está muy logrado, tensión a tope! (eso pasa por haber dejado sin empleo a los acomodadores...si es que no lo hacen peor porque no saben..!) Bsotes!
Una última sesión con un final asfixiante.
Un beso.
Yo creo que fue la taquillera... ;P
Besos.
Buff, creo que ahora me voy a acordar de ti cada vez que vaya al cine...pero la última fila nunca me gustó, bueno si, cuando era un chavalete e iba con las novias de aquellos tiempos, jijiji.
Estremedecido me has dejado Nieves, glub.
Un muac!!!
Ese cable debería alcanzar a todos los que hablan durante la proyección como si estuvieran en el salón de su casa.
Jeje.
Un beso.
jooo..
mnos mal que he leido hoy este post...y no ayer...que estuve en el cine...y no en la ultima fila precisamente...
hubiera estado mirando para ataras toda la pelicula...jejjee...
un abrazo
:-)
Pues yo no vi nada.
Firmado: el acomodador.
Me ha gustado mucho!!
jejeje
:)
No tienes nada nuevo pero te dejo mis saludos.
Un beso.
Este blog pide a gritos una actualización.
Saludos.
Bueno,... estoy esperando una nueva entrega, pero ésta más animosa, please.
;)
nunca se sabe por donde van a aparecer los asesinos.
mejor los dejamos sin palomitas y sin entrada al cine.
Besos
Nieves,
Aunque la historia es de verdadero miedo, cuando aparece el cable y la rodea el cuello me ha salido una carcajada, jaja, me cago en la taquillera, jaja.
Buena historia.
Besos
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