Una mañana se hizo de noche de repente. Un cielo de color plomizo se instaló sobre el lugar. Llovió durante días. El agua fue subiendo de nivel, arrasándolo todo. Una maldición de culebras y sapos se cernía sobre sus cabezas. Un mar de agua dulce caído del cielo. Un cielo opaco y triste que no consentía que asomara el sol. De nada servían las oraciones, ni los ruegos del brujo de la colina, al que acudían los lugareños para que ejerciera sus poderes. Al décimo día escampó. Y las aguas fueron bajando, dejando paso al lodo pestilente y atroz.
Cuando terminó el llanto que caía del cielo, los supervivientes comenzaron su tarea de enterrar muertos. Los columbarios repletos de escamas de peces de colores que habían subido con las aguas. Ni rastro de los jarrones con flores que mantenían frescas los familiares de los muertos. Se preguntaban el porqué de todo aquello. No podían imaginar que sólo era para que alguien, como tú, lo leyera.
26 comentarios:
Muy bueno Nieve, muy bueno. ¿Sabes?, me has dejado pensando un buen rato. el final es excelente.
Besicos muchos.
Nieves,
Un diluvio casi bíblico lleno de literatura mágica digna de cien años de soledad pero en diez días de lluvia y que implica al lector como a un personaje más en dos parrafos bastante ajustados. Un ejercicio de talento como los últimos que vengo leyendo, un cuento con un guiño inteligente, una alegoria hasta del mismísimo acto creativo. ¡Muy bueno!
Besos
Es un texto excelente, ¡da un gustazo leerlo!
También me gusta mucho tu sonrisa, :-)
Gracias, tesoro.
A mi tambien me ha recordado a cien años de soledad.....y ese creo que es el mejor piropo que puedo decirte......ademas del de guapa,claro....je,je
El final del relato me parece muy conseguido
Besitos
Pues me ha encantado el relato, bueno me ha encantado lo bien escrito que está y el final que le has dado y que no esperaba, me encantan las sorpresas :)
Saludos
De viernes y de nuevo en tu espacio... pasa un buen fin de semana.
Saludos y un abrazo.
¡Oiga! ¡Oiga! Que yo no he hecho nada. Sólo venía a saludar.
Me recuerda el final a esas historias de ciencia ficción en las que los personajes, despues de vivir desasosegantes experiencias en un lugar cerrado, resultan ser meros conejillos de indias de seres superiores que los utilizan para sus experimentos.
Otro día cerraré anmtes el grifo. Lo prometo.
Besos.
He llegado casi a asustarme...he provocado yo esto solo por leerlo? Impresionante Nieves, dramático e impactante, clap clap clap, bravo bravísimo! (Por supuesto me he puesto en pie)
Perfecto, ciudadana. En pocas palabras has expresado un sinfin de emociones y, totalmente de acuerdo con otros comentaristas: el epílogo es rotundo.
Un besazo, ciudadana. Es un verdadero placer leerte y haberte encontrado.
Tu escrito me recuerda al terrible
terremoto y tsunami
que nos tocó vivir a los chilenos.
Aun hay gente, aun hay peces
que no encuentran.
Saludos.
Buenísimo! De lo que más me ha gustado de lo que he leído tuyo, lejos. Aunque me voy con cierto sentimiento de culpabilidad ahora...
Justamente ayer me estaba acordando de ti y que no habías subido nada hacía mucho...
Cuídate, Nieves :)
Mejor la razon que expones que los castigos divinos que nos auguran los agoreros.
Cuando se fragmenta la realidad es cuando surge una solidaridad que no debería estar tan enterrada...
Es un relato al principio un tanto apocalíptico pero lo resuelves con un final genial...
Ya creo haberte dicho que me gusta como escribes...
Besicos con olor a jazmín..
Un final sorprendente y que le quita un poco de fatalidad a tu relato, uno muy real por desgracia. Por lo demás, creo que ya te lo han dicho todo.
Un relato muy bien conseguido, aún siendo tan cortito, me ha impresionado por los muchos detalles que nos das.
Un beso.
Feliz domingo.
Domingo, acabada de llegar de mi trote diario hoy entre charcas de 3 dias de lluvia y con el habitual exceso de energia que me deja la inyeccion de vida matutina, me puse a visitar a mis amigos y estando en eso a los amigos de mis amigos, tu escrito me hizo recordar los temores de los tres dias pasados con la insesante lluvia.
me gusto como escribes Nieves.
besito♥
Me encantó. Me encantan los grandes finales.
Besos.
gran final con sabor agridulce
saludos y salud
Bueno, voy a hacer como que no lo he leído... a ver si así no ha pasado....
Un relato muy bien escrito y con catástrofes que están a la orden del día. Me gusta mucho tu forma de escribir.
Un abrazo
ufff...tanto solo para que sepamos que sucedió...¡¡
un pekeñito diluvio ...ahora no vendria mal...que no hiciese daño a nadie...
asi k me llevo el olor a tierra mojada de tus letras...
saludos...¡¡¡
Jooooooooooooo, yo no queiro que se muera nadie... pero el texto es impecable.
Muchísimas gracias a todos por vuestros comentarios. Besossss
Que pena que haya personas tan desgraciadas en la vida que no tienen otro aliciente que criticar y cuestionar a los demas, y ademas tan cobardes de firmar con un anonimo, en fin....hay gente pa tó, y ahora señor anonimo ponme a parir a mi tambien, personaje aburrido y despechado de la vida.
Nievitas que ni el mas negro de los nubarrones nublen tus dias, un beso guapa.
Impactante y preciso como un resorte bien accionado.
Estupendo micro, Nieves.
Qué bonito es tu rincón, qué fotos, que entradas más amenas. Sigo, que aún no concluí.
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